Existe la posibilidad (no te ofendas) de que te joda ser español. Es normal, de un tiempo a esta parte le ocurre a cada vez más personas. (…)

El asunto es peliagudo porque un español está condenado a haber nacido español de por vida, y nada de lo que haga podrá cambiar eso. No obstante, la creciente ola de desapego ante esta identidad nacional, me ha llevado a reflexionar largamente sobre el tema, y creo haber encontrado tres posibles soluciones. (…)

España, más que un país, es un virus, un estado mental que, por algún extraño motivo, necesita dos horas para comer.

Me encanta este sentido del humor tan particular de Mi Mesa Cojea, en algún punto a caballo entre el autoescarnio y la afición por meter el dedo en el ojo a aquellos que se toman demasiado en serio a sí mismos.