Yo he aprendido de las feministas a poner la vida en el centro. Y eso inspira el nuevo país que queremos construir.
#Nuevopaisfeminista
La cita de arriba corresponde a un tuit de Alberto Garzón, candidato de Unidad Popular, publicado también en su perfil de facebook esta mañana.
La que has liao, pollito.
Es alucinante la cantidad de lágrimas machirulas que ha desatado con menos de 140 caracteres. No ha faltado ni uno de los tópicos más rancios
- Si el feminismo busca la igualdad, ¿por qué se llama feminismo y no igualismo?
- Todos los extremos se tocan y por lo tanto tan malo es el machismo como el feminismo.
- Las feminazis nos quieren quitar derechos a los hombres.
- Estoy a favor del feminismo, pero esas zorras hembristas se creen mejores que los tíos
Y así hasta el infinito.
Un político habla de feminismo en plan BIEN (por una vez), y la polvareda que levanta. Pero ¡eh! Aquí nadie es machista, y ya tenemos igualdad. Si hasta podéis trabajar, conducir, votar y abriros una cuenta en el banco sin pedir permiso. ¿Qué más queréis, feminazis?
Luego os hablamos de machismo en la izquierda y hacéis como que no va con vosotros. Os señalamos que tenéis una ceguera selectiva para con el machismo bastante curiosa, y nos salís por peteneras. Pues anda que no os queda nada. El mero hecho de que un candidato mencione el feminismo y os salgan sarpullidos es la demostración más palpable de cuánta falta hace.
Pero lo que más me fascina es la reacción de todos esos hombres que han entrado cual elefante en una cacharrería a señalarle a Alberto Garzón por qué les molestaba su mensaje, cuando varias mujeres les han señalado los errores argumentales de cada una de sus quejas. Con las lágrimas machirulas a cada «eso que dices no es verdad porque» o «estás equivocado porque» podría lavar el coche todos los fines de semana durante un mes. Hay que ver la poca costumbre que tienen por ahí de que las mujeres les lleven la contraria. He visto a hombres casi echarse a llorar porque decían sentirse atacados, juzgados, insultados y/o discriminados tan solo porque varias mujeres ¡no les daban la razón! Les argumentaban calmada y razonadamente en qué y por qué sus argumentos eran incorrectos, con artículos, con enlaces, con datos… Y los hombres reaccionaban de forma infantil, victimizándose, negándose a atender ningún tipo de contra-argumentación basándose en un imaginario «tono de soberbia» utilizado para responderles que no les gustaba.
Un par de ejemplos, sin ánimo de ser exhaustiva:
Y una última respuesta de un hombre, para que no se diga, que me ha hecho recuperar la fe:
Mi preferido es el que nos ha acusado de «atacarle en plan bullying» tras un intercambio de 10 minutos en el que se le han dado datos de por qué estaba equivocado.
Lo que lo hace aún más ridículo es que precisamente esta hombre que tan atacado se siente, tiene como leit motiv en su biografía «si te digo que eres imbécil es porque lo eres«, y ahí te las apañes, pero ojo con llevarle la contraria porque entonces le estás «atacando en plan bullying«. Todo bien.
Ha sido algo incluso desagradable de ver. Tenéis el machismo tan interiorizado que ni os dais cuenta.
Por no mencionar la que se ha montado cuando Alberto Garzón dijo que las compresas eran un producto de primera necesidad y sus compañeros de debate se retorcían incómodos ante la palabra, mientras a su vez un representante de Ciudadanos teniendo que cancelar su cuenta en twitter ante la indignación generalizada que causó entre cientos de twitteras menstruantes y reírse de la propuesta de bajar el IVA a las compresas porque al parecer un producto que tiene que usar un 50% de la población durante casi la mitad de su vida no entra dentro de la categoría de «producto de primera necesidad». No como la Viagra, claro, que esa tendría que financiarla la seguridad social.
La Viagra sí es un producto de primera necesidad que debería recetar la seguridad social, pero las compresas con IVA de artículo de lujo. Muy bien, sí señores, ahí dejando claras cuales son sus prioridades.
Y para rematar, toda una vicepresidenta del Gobierno recomienda a las mujeres para evitar la violencia de género que las chicas no se dejen revisar el móvil por sus novios, y aquí no pasa nada. Ya está, ¡mira que es fácil! No me explico cómo no se te ha ocurrido a ti sola, mira que eres tonta. Todo en orden. Siguiente pregunta.
Este blog no está en campaña ni te voy a decir por quien votar o por quien no votar. Pero si hay algo que tengo claro es que este 20N no voy a votar machismo.
Muy buena reflexión. Gracias.