La Friend Zone es ese lugar inexistente en el que dicen los tíos que les has situado cuando no quieres tener algo con ellos, sea por la razón que sea. Y es que una mujer no puede elegir con quién mantener relaciones por su cuenta y riesgo y se establece un mecanismo neoliberal que mercantiliza los esfuerzos de esos buenos hombres a los que de pronto y sin saber por qué, les debes sexo o amor por el mero hecho de haberse portado decentemente contigo. Algo así como que han echado demasiadas monedas a la maquinita como para que ahora no les salga el premio gordo, pero sin la ludopatía de por medio.
Así es, algunos hombres se creen tan legitimados a obtener favores de las mujeres que el hecho de que seamos seres con voluntad y deseo propios, se les escapa. Tu amigo se ha portado bien contigo y tú tienes que corresponderle en sus sentimientos o eres una zorra sin alma que, por supuesto, se merece todo lo peor y especialmente dar con algún tipejo que te trate tan mal como mereces. Porque él sí que lo hubiera hecho bien…
Extraído de este artículo de Adriana Andolini en Grazia: no son golpes pero es violencia de género.