Ayer la periodista Ana Pastor entrevistó en La Sexta al líder de Podemos, Pablo Iglesias, y entre otras cosas le preguntó por el debate abierto sobre la regulación, abolición o prohibición de la prostitución. A lo que Iglesias respondió algo así como que cuando el movimiento feminista alcance un acuerdo y cierren el debate, Podemos se cuadrará con lo que decidan.

Esto a priori podría sonar muy bien, un partido que se pone a disposición del movimiento feminista, sin injerencias, y que acepta las resoluciones acordadas sin paternalismos.

La realidad es muy diferente: Iglesias está echando balones fuera, se está escaqueando del debate, está evitando que su partido se posicione en un asunto que tiene fragmentado al movimiento feminista desde hace más de dos siglos, y que no se va a resolver en un periodo corto de tiempo. Y esto Pablo Iglesias lo sabe de sobra. Renunciar a tomar partido hasta que el movimiento feminista resuelva los tensiones internas en un tema tan sensible y complejo es, simplemente, una excusa para evitar posicionarse. Me habría parecido menos decepcionante y más comprometido que dijera que el Círculo Feminismos de Podemos aún está debatiendo la cuestión y buscando un consenso interno.

Pero es que además, al menos por lo que a mí respecta, me da igual cual es el posicionamiento de Podemos respecto a la prostitución. Lo que yo quiero saber es cual es su modelo de sociedad.

Quiero saber si en el modelo de sociedad que promueve Podemos, los hombres tienen el derecho o no de simplificar el contrato social en la interacción con las mujeres y con dinero pueden obviar todo eso tan molesto de tratar a las mujeres como a seres humanos con intereses y deseos propios, y no como objetos para su satisfacción personal.

Quiero saber si en el modelo de sociedad en la que Podemos sueña y trabaja para conseguir, existen espacios libres de feminismo donde los hombres pueden relajarse del agotador trabajo de tratar a las mujeres como a iguales, donde las mujeres que pretendan reivindicar su propio deseo en igualdad de condiciones a los hombres tienen vetado el acceso, y donde la necesidad de ellas se transforma en el disfrute de ellos.

Quiero saber si en el modelo de sociedad que Podemos intentará desarrollar, las niñas seguirán interiorizando la prostitución como una alternativa laboral si vienen mal dadas, y los niños la seguirán interiorizando como una alternativa de ocio legítima si no tienen ganas de tomarse la molestia de interactuar con mujeres para algo más que su propio placer.

Ese es el posicionamiento de Podemos que realmente me interesa. El resto es palabrería hueca.

11 comentarios

  1. Hay mas opciones en esos modelos de sociedad, como convertir la prostitución en otro lugar mas donde los hombres no pueden «relajarse» respecto al trato con las mujeres. En la prostitucion feminista los hombres no vienen a mangonear y a decidir como quieren ellos que sean las cosas. Si conseguimos que todas atiendan así, no tendrán «refugio» al que irse a hacer esas cosas, a la vez que puede seguir existiendo la prostitucion, bajo las medidas y decisiones de las propias prostitutas.

    A mi me parece bien que Pablo Iglesias quiera esperar a ver que decide su partido, y me parece bien que no se vaya con el todos a una a imponer el abolicionismo que ya se ha demostrado que no funciona para acabar con la trata. La cuestión es hablar y ceder lineas rojas, y si un grupo numeroso está pidiendo tener voz, lo mínimo es escucharlo, aunque haya otros enfoques dentro del mismo problema que también requieran soluciones. Aunque en realidad es muy simple, porque tanto putas voluntarias como victimas de trata buscan lo mismo: no tener estigma para no ser perseguidas ni denostadas por la sociedad, para así poder defenderse ante los proxenetas y patrones que operan sin limites ni problemas en la sociedad.

    Multar al cliente solo perjudica tanto a las victimas como a las voluntarias. Ningun proxeneta va a parar ante una multa, solo las pondrá a precios mas bajos para hacerlas tan atractivas que resulten algo tentador por lo que arriesgarse. El que folla no es el, total! En Suecia desde que empezaron a finales de los 90 han puesto unas 8.000 multas. Sale a mas o menos un cliente por día. Todos sabemos de sobra que no hay solo un cliente por dia en toda Suecia ni de casualidad. Lo que si que ha ocurrido es una bajada de precios masiva, por lo que siguen yendo y en mejores condiciones que antes. Estan encantados ellos! Ellas, bueno… trabajar mas horas para ganar lo mismo, a nadie le gusta. La oferta y demanda en la prostitucion no funciona como muchas piensan ni como en otros sectores donde se comecia con objetos y no con servicios. No es tan simple como que si reduces la demanda, tachan, habrá menos putas. No, no van a desaparecer magicamente porque tengan menos clientes, porque si pudieran acceder a otros trabajos ya lo habrían hecho desde el principio. Te recomiendo esta lectura que lo explica mejor que yo: http://eminism.org/blog/entry/340

    Yo no tengo problema con un modelo abolicionista, pero es que todos los que hay, casualmente, no benefician ni a las victimas ni a las voluntarias de ninguna manera. Si llegais a un modelo que acabe con la trata a la vez que mantiene o mejora los derechos de las que trabajan en ello y que no lo quieren dejar, seremos todo oídos.

    Metamos el feminismo en la prostitucion en lugar de pretender usar el feminismo contra la prostitucion. Como se quiere hacer con camareras de piso, recogedoras de fresas y cualquier otro sector precario donde lo ideal es que las trabajadoras ganen derechos para defenderse de las condiciones abusivas y los empresarios aprovechados, y poder salir cuando lo deseen. Mejoremos las condiciones laborales en general primero, que haya mejor acceso y de mejor calidad a otros trabajos, y verás como en un tiempo empiezan a faltar putas aunque sobren financistas.

    Un saludo, Jessica.

    1. Si convertimos la prostitución en un lugar donde los hombres no puedan relajarse respecto al trato con las mujeres y la hacemos feminista, ¿no pierde la prostitución su razón de ser? Pregunto porque no me creo que esos que escriben en determinados foros, o quienes dicen que acuden a la prostitución porque ligar les resulta muy costoso en términos de tiempo y energía mental, vayan a tolerar una prostitución feminista. O igual no entendemos lo mismo por prostitución feminista, que también puede ser.

      1. Hola, Jessica, soy aquel tipo que hizo un vídeo respondiendo al «Hola Putero» de towanda rebels, en el que explicaba que soy virgen, que me planteo acudir a prostitución, etc.

        Creo que una prostitución feminista como la que plantea Lilu tendría mucho sentido para mi. A menudo mi problema es que desearía poder plantear directamente una relación sexual sin miedo a ofender a la otra persona. Dicho crudamente, desearía poder decir a una chica educadamente «perdona, ¿tendrías sexo conmigo?» y si ella no lo desea, que me rechace, pero sin enfadarse ni darme un guantazo. Con una prostituta podría hacer esto mismo. No creo que esto sea tratar como un objeto, porque le pido permiso y respetaré su respuesta, y eso no se hace con los objetos.

        Si se regulase una prostitución feminista como la que propone Lilu, yo tendría la completa seguridad de que esa chica está haciendo eso voluntariamente, sin presión de ningún tipo, y esa seguridad es lo que me falta ahora para decidirme a recurrir a ella.

      2. Sí es tratarla como un objeto aunque le pidas permiso, porque lo único que te interesa de esa persona es la satisfacción de tu propio placer. Que «le pidas permiso» para utilizarla es el mínimo obvio ya que de lo contrario ese acto tiene un nombre y una tipificación en el código penal dependiendo de los métodos utilizados: abuso sexual, agresión sexual, violación…

        El hecho de que una mujer pueda decirte que no de manera educada tiene que ver con cómo plantees la pregunta. Si lo planteas de manera grosera, es probable que se enfade; si lo planteas de manera violenta, cabe la posibilidad de que reaccione mediante la autodefensa. Si lo planteas con respeto, no hace falta ser prostituta para rechazarte. De hecho, es más improbable que una prostituta te rechace pese a no desearte puesto que es su necesidad previa la que la ha llevado a esa situación. Si la precariedad económica no te parece suficiente motivo como para considerar que te estás aprovechando de la necesidad de una mujer para tu satisfacción personal, nada lo hará.

        ¿Has probado a intentar no ser una basura de persona que considera que el único motivo de la existencia de las mujeres en el mundo es que tú no tengas que masturbarte a solas? Cabe la posibilidad de que si dejas de considerar a las mujeres como medios para tu satisfacción personal y empiezas a considerarlas sujetos deseantes de pleno derecho, a alguna le resultes lo bastante interesante como plantearse algún contacto físico contigo. Claro que si lo haces solo con la idea en mente de mojar el churro como objetivo vital, se te va a ver el plumero igualmente. Tiene que ser un cambio genuino: dejar de ver a las mujeres como agujeros con patas y tratarlas como seres humanos con sus gustos, sus intereses y sus ideas propias tiende a aumentar las posibilidades de follar. Claro que también es más cansado que abrir la cartera, eso no te lo voy a negar. Yo diría que a la larga compensa, pero qué sabré yo.

      3. Hola, Jessica, perdona que responda aquí, no he visto la opción «responder» en tu respuesta.

        Dices: » Que “le pidas permiso” para utilizarla es el mínimo obvio ya que de lo contrario ese acto tiene un nombre y una tipificación en el código penal dependiendo de los métodos utilizados: abuso sexual, agresión sexual, violación…»

        Yo creo que esa es la única manera real en la que se cosifica y objetiva a alguien. La agresión, o bien el engaño (hacer creer a alguien que buscas una relación seria cuando solo buscas sexo, etc.) son los únicos criterios objetivos que determinan que es utilizar a alguien. De lo contrario, se podría también considerar «utilizar» las relaciones sexuales esporádicas sin compromiso (las que son consesuadas por parte de ambos, sin engaños, como decía antes.) Siempre que haya algún grado de respeto a la otra parte, ya no hay cosificación, así lo entiendo yo.

        Respecto a lo de plantear la pregunta con educación… mi temor no es que me rechace, si no ofender a la chica, y lo más probable es que se ofenda por muy educadamente que se lo planteé… puede que no lo exteriorice mucho, pero por dentro se sentirá molesta.

        No es que no quiera nada más de las mujeres. Pero a veces, siento deseos de tener sexo sin tener relación de pareja. ¿Eso está mal? ¿A quien acudo, a una desconocida o a una amiga? A una amiga me arriesgo a perderla si le planteo eso, y con una desconocida ya puedo esforzarme en ser educado, que… bueno.
        Una prostituta está preparada para recibir esta clase de proposiciones.

        No quiero aprovecharme de la precariedad económica de nadie, y por eso no me decido a contratar a ninguna, porque no tengo forma de estar seguro de si esa chica está ahí por necesidad o porque quiere. En el concepto de sociedad que proponía Lilu en su comentario, con prostitución regulada en condiciones y respetando derechos humanos, no hay esa duda, la prostituta es voluntaria.

        Tu le decías a Lilu que la prostitución tal como ella la planteaba pierde su razón de ser, porque muchos hombres no lo aceptarían. Pues yo si. Y me parece razonable pensar que haya más como yo.

        Tampoco es que esto sea una cuestión trascendental… solo miro si hay alguna forma de satisfacer a todos. Prostitutas voluntarias, víctimas de trata, feministas como tu y bueno, «individuos» como yo. Si al final no es posible, pues no es posible, que le vamos a hacer. Si al final la única solución es abolir, pues que se «abola» o como se diga. Si me tengo que quedar sin… «eso»… ¡pues me quedo, ya me las buscaré! Pero si hay algún resquicio de duda, de la posibilidad de encontrar una solución satisfactoria para la mayoría de las partes, creo que deberíamos plantearnosla, explorarla, antes de descartarla. Saldríamos todos ganando.

        ¿No…?

      4. Sigo sin comprender por qué incorporas mentir, engañar o violentar dentro de la definición de utilizar a alguien para tu propio placer. Si lo que quieres es no sentirte mal porque eres un nice guy que ni miente, ni amenaza, ni violenta, no cuentes conmigo para ponerle azúcar a tu conciencia. Es perfectamente factible cosificar a una persona porque no te interesas por ella como ser humano sino simplemente como un objeto para conseguir un medio, que es satisfacer tu propio placer, sin que tengan que mediar mentiras, amenazas o violencia. Quieres utilizar mujeres para satisfacer tu deseo, para obtener placer. ¿Que para lograr tu objetivo no quieres engañarlas ni violentarlas? De acuerdo, gracias, muy amable, pero no me pidas que vaya encargando una medalla. Sigues tratando a las mujeres como objetos y no como seres humanos, pero puedes estar tranquilo: nadie va a meterte en la cárcel por ello. No sé qué más me pides.

      5. Bueno, ahora principalmente te pedía saber como encajarías en tu esquema la posibilidad de una prostitución tal como la plantea Lilu en caso de que los hombres la aceptasen (ya que tu principal argumento contra ella era que los hombres no la aceptarían.) Lo otro… bueno, me he nublado por mis fantasmas personales, perdona.

      6. Hola, Jessica.

        He vuelto a leer este hilo. En aquel momento, no te respondí a lo que me preguntabas (lo de por que incorporo mentir, engañar o violentar dentro de la definición de utilizar a alguien) porque no conseguía encontrar una forma «breve» de hacerlo, necesitaba hacer una explicación larga y no quería escribir un texto demasiado largo porque bueno… te sigo en twitter y a veces te quejas de desconocidos que te escriben tochos muy largos contándote su vida… no quería ser uno de esos…

        Bueno, voy a intentarlo… trataré de ser lo más conciso que pueda…

        Empece a plantearme esta re-definición mía de «utilizar» o «cosificar» en mi adolescencia. Tuve relación con ciertos entornos religiosos conservadores, de los que me solían llegar argumentos frecuentes contra el sexo casual. Uno de esos argumentos (aparte de los típicos, «pecado», «palabra de Dios», etc.) es que el sexo casual es cosificar. Dos personas se «usan» la una a la otra de forma egoísta, como si solo fuesen objetos.

        En mi mente adolescente, se me ocurrió que no es tratar a una persona como un objeto, porque a los objetos no se les tiene consideración. «Pero vamos a ver», me decía «¿es que acaso le pides permiso a un bolígrafo para escribir con el? Y cuando escribes con el, ¿tienes cuidado de no hacerle daño? Pues si haces esto con una persona ya no estás tratándola como un objeto». Por ingenuo que sea, a mi me pareció (y me parece) algo muy lógico.

        Quizá sea una visión simplista y tosca, pero es que, realmente, ¿que significa eso de «las personas nunca deben ser medios»? Si me siento triste o mal, y recurro a un amigo para contarle mi tristeza, ¿le estoy usando como un medio? Después de todo en ese momento me interesa sobretodo descargar mi malestar y sentirme mejor.
        Por otro lado, un amigo es alguien con quien ya tengo una relación y no solo le cuento mis problemas. Entonces… digamos que lo hago con un desconocido. Estoy sentado en un banco, y me pongo a hablar de mi tristeza con alguien sentado a mi lado.
        A veces pasa. Hay quien, en determinado momento, se ha desahogado con desconocidos. Incluso hay quien aconseja hacerlo. «Es mejor contárselo a un desconocido, a alguien que no le importe», he oído decir a veces.
        ¿Se podría decir que quien hace eso no le importa la otra persona? Es un desconocido. Es posible que no le vuelva a ver jamás en la vida.
        ¿Que significa que «te importe la otra persona»?
        Quizás no implique que tengas por obligación que saber su nombre, interesarte por su vida, etc. O al menos, no siempre. Puede que… que simplemente baste con respetarla. Respetar su dignidad humana.
        Si le cuento mis penas al desconocido del banco de mi ejemplo, y este me interrumpe y me dice «perdone, señor, pero yo también tengo mis problemas. No se lo tome a mal, pero no deseo hablar con usted…» y entonces, yo me enfado, y despotrico, y me pongo a hacer como Jose Mota en su famoso gag «el cansino histórico» (a gritarle «¡¡so mugroso!! ¡¡Piojoso!!» etc…) no cabe duda de que soy un egoísta. El otro tiene perfecto derecho a rechazarme, no tiene ninguna obligación conmigo. Yo debo respetar eso. Y en caso de que acceda a escucharme, debo estarle muy agradecido, precisamente porque no tiene ninguna obligación de hacerlo.

        Si voy a practicar sexo con una chica, ya sea una a la que haya conocido hace poco, o bien una con la que he acordado un servicio de pago, y de repente, esa chica cambia de opinión, o se pone indispuesta, o le entra una crisis emocional por vete a saber que problemas o tensiones lleva acumuladas dentro, y yo me enfado, y me pongo en plan «oye, que he venido a follar», está claro que soy un egoísta (y lo soy por el hecho ya solo de enfadarme, aunque luego no «fuerce» que me de lo «prometido») y la estoy tratando de forma insensible porque no respeto su voluntad.

        Ahí está la clave. La VOLUNTAD. Los objetos no están dotados de voluntad. Ni de sentimientos. Ni de humanidad. Quien trata a las personas como objetos, las trata como si no tuviesen nada de eso. Y eso se puede hacer de forma violenta y directa, o se puede hacer con engaños, astucia y manipulación. O puede, simplemente, hacerse mostrando desprecio a quien no cumple la propia voluntad. En todos los casos, se está despreciando la voluntad del otro, buscando solo la auto-satisfacción sin considerar al otro ni su dignidad. No cabe duda de que eso es tratar a las personas COMO SI FUESEN OBJETOS.

        Volviendo al tema sexual, está claro que una relación sexual en un contexto de amor es mucho mas plena y satisfactoria. Pero una relación sexual esporádica, aunque sea algo inferior, no tiene porque ser algo despreciable, y no tiene porque implicar tratar a alguien como un objeto, mientras haya respeto mutuo y todos los implicados sepan y quieran lo que hacen.

        Y esta es la razón de porque veo «utilizar» como lo veo. Te pido perdón si algo de lo que he dicho te ha hecho enfadar (a veces me ha pasado, hablando con alguien se ha enfadado conmigo porque mis argumentos le parecían muy tontos o naïve), solo digo lo que a mi me parece lógico.

        Yo no te pedía que me encargases una medalla. Pero me dolió un poco cuando me llamaste «basura». Me pareció un juício demasiado duro. «Basura». Basura es lo que no sirve, lo que se tira, lo que no tiene nada bueno ni que se pueda aprovechar. Tal vez necesito mejorar mucho. Quizá mis planteamientos son defectuosos, puede que tengas tu razón y yo no vea un factor clave que tu si ves. Quizá me vea obligado a cambiar de opinión de aquí un tiempo. Pero tampoco soy… «basura».

        (Lo temía, al final me ha salido muy largo… lo siento…)

  2. Si, me convencen tus argumentos en cuanto a planteamiento de P.I.
    Muy buenas las preguntas¡.
    Pienso que así en teoría PI, y otros muchos estarían de acuerdo.
    Las contradicciones surgen cuando aterrizamos en la realidad.
    Una pregunta?
    Hacemos una propuesta al gobierno/ sociedad, que legalice el derecho a jubilación retribuída por el sistema de pensiones, para las prostitutas con x años de servicio? y con una edad en la que ya somos rechazadas en el mercado laboral?. Como no se ha venido cotizando por la tarea ejercida, no hay derecho a prestación por jubilación¡

  3. A los trabajos de explotación que citas, añadiría trabajadoras domésticas, que tampoco están reconocidas en el Regimen general, se regulan por una normativa que les niega derechos que están reconocidos en otros convenios, y a las trabajadoras asistenciales en geriatría y pluridiscapacidad, dónde nunca se ha reconocido la carga de trabajo de características psíquicas y sus repercusiones en transtornos psicológicos/psíquicos, entre otros aspectos.

  4. Hola Jessica:

    Buen artículo y muy interesante. La verdad es que hace poco debatiendo sobre este tema creo que llegamos a un punto que puede ser interesante.
    Y si el mejor modo de llegar a un mundo en el que no haya prostitución o sea muy muy residual, es a través de primero regularla y «desmitificarla» de alguna manera?
    Por supuesto que no es un «trabajo como cualquier otro». Pero sin lugar a dudad para mucha gente es la opción preferente de las que tiene. Y es así. En el Comité Anti Sida de mi ciudad, con el que colaboro, vienen muchas chicas que no querrían los empleos a los que pueden acceder, por su formación y conocimientos. Y es su derecho.
    Yo lo asimilaria a una carrera en el deporte o a un trabajo de alto riesgo como la mina, es algo que haces que te deja secuelas y no siempre es agradable pero que existe.
    Yo no consigo ponerme en la cabeza del putero, no pagaría por acostarme con alguien, pero sí entiendo por otro lado pagar a un(a) especialista en alguna cosa concreta. Quizás a una domina experta, por ejemplo. Y eso también es trabajo sexual.
    Por otro lado está el tema terapéutico, como bien sabrás mucha gente con diversidad funcional física y psicológica paga por poder tener sexo, y sé por cuidadores, que les cogen gran cariño a las mujeres con las que se acuestan y que estas se muestran dulces y tiernas con ellos como nadie lo ha sido nunca.
    Creo en un mundo en que la mente de la gente entienda que el mejor amor es el de voluntad propia, también creo en un mundo en el que haya sexo gratis a espuertas y a gusto. Creo en un mundo en el que no haya nadie en régimen de esclavitud de ningún tipo y mucho menos sexual, que creo que con creces ha de ser la más dura, a nivel físico y psicológico.
    Pero creo que hay imperativos que es mejor afrontar de frente -como con las drogas, por ejemplo- y que mientras haya un hijodeputa salido creído con pasta que quiere «utilizar» a una pibita sin tener que darle cháchara para convencerle de que es más que un cacho de mierda con patas y billetes y mientras haya una mujer que tiene una necesidad económica acuciante en un sistema salvaje, va a haber prostitución.
    Entonces creo que mientras la educación afectiva que le damos a los más jovenes va haciendo efecto y mientras luchamos por un sistema que no deje fuera a nadie, que no son cosas de un día para otro, creo que mientras tanto sería interesante regular, de una manera distinta q en Alemania, por supuesto: una legislación que entre otras cosas proteja a las prostitutas de los «empresarios» -por llamarlos de alguna manera- que se forran con ellas sin poner el culo, y que les aporte beneficios sociales (paro, cotización…).
    No soy muy fan del «menos malo» como opción, me gusta pensar que la humanidad puede llegar a que todo el sexo sea humano, y el fruto de la prostitución no creo q lo sea -aunque muchas de las que vienen a por condones cuentan historias de los q sólo pagan por hablar o q hasta las llevan en una cita sin sexo pq se sienten solos, pero no será la mayoría-. Pero de alguna manera, cuanto más me informo más veo que es un asunto tan viejo como el ser humano y con el que no vamos a acabar de un día para otro así que siendo prácticas habría que ver como mejorar en la medida de lo posible la situación de las que están ahí y esa es su decisión y luchar contra las mafias que esclavizan, aquí y ahora. Como un primer paso.
    Porque hay que asumir que formas veladas de prostitución como las esposas florero o como los SugarDaddies -y las SugarMummies- forman parte de la sociedad e incluso entre quienes tienen sus necesidades primarias cubiertas utilizan su cuerpo y su sexo como moneda de cambio para obtener dinero, bienes y regalo y por otro lado que el trabajo sexual es algo complejo, históricamente y en la actualidad que va más allá de un tipo follandose a un cuerpo en una cama sucia de un hotel y creo que lo primero para crear un mundo en que la gente haga sexo sólo por placer mutuo y crecimiento compartido es asumir el mundo como es y atacar paso a paso.
    Porque pretender que aboliendo la prostitución vamos a acabar con ella me parece un poco demagógico y bastante iluso, pero quizás con un plan a 50/60 años vista de ir paso a paso educando + quitando misterio + empoderando a las trabajadoras sexuales (en el sentido de tener + derechos, + opciones, + partidas para formación en otras cosas si lo desean y esto se podría pagar quizás con los impuestos q el mismo negocio genere).
    Quizás el mundo ideal sin prostitución del mañana necesita hacer algunas concesiones poco a poco para ir modelando el mundo hasta llegar a ese punto.
    No sé, dime qué opinas.
    Un abrazo.

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