Poder, orden social y tecnología

Los sesgos no siempre son tan evidentemente intencionados o con una finalidad política como el ejemplo de Moses, o el de la arquitectura hostil. En la mayoría de ocasiones, se trata de conceptualizar el estándar de una manera determinada: en concreto, el hombre blanco, hetero, de clase media y entre 30 y 45 años. Todo lo que no encaje en el canon es sistemáticamente obviado.

¿Puede la tecnología ser racista?

No hay nada natural las trayectorias tecnológicas, y como tal se empapa de los valores culturales dominantes en la sociedad en la que tiene lugar, y que son propios de las personas implicadas en el proceso de innovación tecnológica. Un ejemplo es el del racismo en los algoritmos de la inteligencia artificial detrás de las principales plataformas web y redes sociales: Google, Facebook, Twitter…

Huelga de transportes y VOX

Hablemos de cómo VOX está instrumentalizando las legítimas demandas del colectivo de transportistas, entre otros, mientras la izquierda ensimismada no es capaz de sacarse la cabeza del culo ni con un GPS y les deja espacios cada vez más grandes para que lo ocupen y ganen terreno.

David Hume y la filosofía homeopática

El espíritu de la filosofía de David Hume sigue vivo en el siglo XXI, en las sociedades posmodernas donde todo es relativo, donde no existen las certezas absolutas y la experiencia personal se erige en fuente del conocimiento. Sociedades donde el método empírico ha desalojado al método científico, algo que se puede observar especialmente entre los defensores de la homeopatía y su mantra “a mí me funciona”, lo que Vicente E. Caballo e Isabel C. Salazar han acuñado como «amimefuncionismo».