Caso IVECO: no es un suicidio, es un asesinato

La repercusión social de hacer público un video erótico es muy distinta para hombres y para mujeres. Para ellos es motivo de orgullo, para nosotras de vergüenza. El hombre que enseña fotos o videos íntimos, está traicionando la confianza que la otra persona ha depositado en él. Sin embargo, no recibe de forma generalizada el reproche social de su grupo de iguales (otros hombres), sino todo lo contrario: su estatus social dentro del grupo se eleva con ese acto de traición a una mujer.